Manualidades

Bote para lápices de manualidades

Llevaba tiempo pensando en hacer un bote para lápices de manualidades. Uno que me permitiera tener a mano todos los millones de bolígrafos, rotuladores, pinceles y demás que tengo para hacer cositas. Y es que, a mi con los bolis me pasa como con la ropa, que a veces no sé ni lo que tengo. Pues ese fue el primer motivo para hacer el bote para lápices, un espacio donde poder tener todos los rotus, pinturas y bolis que he acumulado a lo largo de los años.

El segundo punto importante era que fuera portátil y que me pudiera llevar de un lado a otro. Desde hace más de un año mi «centro de operaciones» está congregado en el salón, (que me río yo de los espacios multicisciplinares… ¡ay si vieran mi salón!) y necesito mover las cosas cada vez que necesito la mesa.

Materiales para hacer un bote para lápices de manualidades

  • Cajas de cartón del tamaño del que queramos hacer nuestra estructura
  • Rollos de papel higiénico vacíos (si es de rollos industriales mucho mejor porque son más resistentes)
  • Papeles para decorar (también valen revistas o papel de periódico)
  • Alkil para endurecer la caja, pintura negra para los rollos de papel y silicona caliente

Los pasos para hacer el bote para lápices son muy sencillos.

  1. En primer lugar montamos la estructura. En mi caso, como quería que tuviera asa y que fuera grande, pegué dos cajas iguales, reforzando la parte de unión para que fuera más resistente. Luego recortamos los laterales para que los bolis queden más accesibles. En el interior, monté dos niveles de altura, poniendo un poco de techopán en la parte trasera de ambas cajas. Por último, recortamos el asa.
  2. Hecha la estructura, queda forrarla. Yo lo hice con unos papeles que compré en Lidl, que son más finos que los de scrap habituales, y para esto me venía mejor. Los pegué con pegamento de barra y posteriormente los cubrí con una pequeña capa de alkil mezclada con agua. Dejad secar un tiempo.
  3. Luego montamos el interior con los rollos de papel higiénico. En mi caso, como hice dos niveles de altura para que los bolis se vieran mejor y cada lado de la caja era de un ancho diferente, la estructura de rollos era diferente. En un lado hay dos filas unidas y una sola arriba y en el otro caso, dos filas de rollos en el de arriba y abajo, que era algo más ancho, dejé unos botes de lápices normales que tenía por casa (para aprovecharlos). Una vez planteada la estructura, pegamos los rollos que vayan a ir juntos con silicona (en mi caso eran tres hileras, dos dobles y una simple) y los pintamos para unificar el color y que quede mejor rematado. Yo elegí el color negro (bastante alegría le iba a dar luego con los millones de bolis) y cuando secó, rocié un poco con un spray dorado que tenía de navidad. Y también dejamos secar.
  4. Cuando la caja y los rollos estén secos, los colocamos en su sitio y ¡listo! Pensé en pegar los rollos a la caja, pero para no estropearla y, como van encajonados no se mueven, los dejé posados sin más.

¡Y aquí tenéis el resultado! Os he preparado un montón de fotos de varias perspectivas para que lo veáis genial. ¿Os gusta mi bote para lápices para manualidades? ¡Yo estoy encantada!